Ahora que la cuesta de septiembre empieza amainar, y que los puentes de octubre están aquí al lado, empieza el momento de empezar a plantearse de qué nos vamos a disfrazar en Halloween. Porque a pesar de que esta fiesta haya sido importada de la sociedad anglosajona, ha cogido fuerza en nuestro país.
Pero no solo podemos disfrazarnos en el día de todos los santos, al fin y al cabo, este día no es más que una excusa para disfrazarnos. Existen mil y una excusas para disfrazarnos, porque a quien no le gusta disfrazarte y actuar con un rol diferente. Es difícil no encontrar cada vez más situaciones en las que los disfraces toman protagonismo.
Si nos fijamos en los más pequeños, los disfraces son algo que les divierte mucho. La oportunidad de disfrazarse de héroes, princesas, animales o cualquier cosa que se les ocurra a los niños, es siempre bien recibida. Aunque hay que prestar atención a los disfraces, ya que no todos son adecuados para los niños.
De hecho, para comprar un disfraz para niños hay que tener en cuenta ciertos puntos importantes. Como por ejemplo tener cuidado de que el disfraz sea cómodo y flexible, que no contenga tejidos o accesorios que puedan dañar físicamente al niño, o que el niño o niña se sienta a gusto con el disfraz.
Pero no solo son los niños los que se disfrazan, los adultos aprovechamos las fiestas con amigos para disfrazarnos. Y incluso hay actividades sociales, como las despedidas de soltero, en las que ir disfrazado es imprescindible para destacar y divertirse. Un plan muy simple puede convertirse en un plan extremadamente divertido, con un disfraz.
Además, comprar un disfraz nunca ha sido tan fácil como lo es hoy en día. Si hace unos años teníamos que recorrer muchas tiendas para encontrar el disfraz perfecto, o el accesorio que nos diferenciase, ahora podemos hacerlo desde casa, sentados en nuestro sofá. Pero hay que tener en cuenta ciertos aspectos antes de comprar en Internet.
Consejos para comprar disfraces por Internet
Como en cualquier tienda en la que se vaya a comprar, es importante revisar las fotos de los productos que vayamos a encontrar. Si en la web que estamos buscando las fotos son escasas, los detalles de los disfraces brillan por su ausencia, e incluso la empresa no da detalles cuando preguntamos, podemos empezar a desconfiar. Por el contrario, cuando los detalles están en todos los disfraces, y las fotos muestran como queda realmente un disfraz, podemos confiar.
Ya lo hemos mencionado antes, pero vamos a poner énfasis en la atención al cliente. Los disfraces pueden quedar bien a una persona y a otra no. Por eso es importante que haya alguien para que resuelva nuestras dudas, porque puede ser que cuándo recibamos el disfraz no quede como aparecía en la web.
Y también es importante fijarnos en las políticas de envío, que deben de buscar la mayor flexibilidad posible a un precio competitivo. Y no hemos de olvidar de prestar atención en la política de devoluciones, que es importante cuando a pesar de poner todos los medios posibles, no nos convence lo que hemos comprado.
Por último, un aspecto que mucha gente no valora es que algunas tiendas tienen tiendas físicas, además de Online. Es el caso de La casa de los disfraces, una empresa que lleva funcionando desde 1994, y que dispone de tiendas físicas con 5.000 metros cuadrados en los que encontrar justo lo que buscas.
En conclusión, las excusas para disfrazarse siempre están ahí, y desaprovecharlas puede suponer perderse experiencias muy divertidas.