Hoy quiero contarte algo que me parece súper importante si eres policía o estás en proceso para serlo. Durante mucho tiempo, yo también soñé con ser policía nacional (me tomó muchos años de sacrificio, esfuerzo y estudio, pero al final lo conseguí). De hecho, mientras estudiaba las oposiciones, tuve la oportunidad de asistir a un curso muy básico de defensa personal policial, que apenas duraba un par de horas. No me pareció suficiente, y desde entonces siempre he pensado que un buen curso de actualización en defensa personal es algo que todos los policías deberían tener.
Por eso, hoy quiero compartir contigo por qué creo que comprar un curso especializado en defensa personal policial es una buena idea para mis compañeros de trabajo policías. Te voy a explicar qué temas suelen abordar estos cursos, qué ventajas tiene hacer uno completo y actualizado, y también voy a hablar un poco de la ley y de lo que yo pienso que debería saber todo policía.
¿Por qué un curso de defensa personal policial?
Cuando empecé a estudiar para ser policía, lo que más me emocionaba era la idea de ayudar a la gente y hacer justicia. Pero también sabía que en la calle no todo es sencillo ni predecible. Muchas veces, los agentes nos enfrentamos a situaciones peligrosas donde la preparación física y mental marca la diferencia. Ahí es donde la defensa personal entra con fuerza.
Un curso básico que hice me enseñó lo más elemental, pero me quedé con ganas de mucho más. Me di cuenta que la defensa personal policial no es solo aprender a defenderse, sino a manejarse con seguridad y control en situaciones complicadas, sin poner en riesgo ni a ti ni a terceros.
Por eso, un curso de reciclaje y actualización me parece fundamental. No solo para los policías nuevos, sino también para quienes ya llevan tiempo en el cuerpo y necesitan refrescar o mejorar sus técnicas. Porque la verdad es que las formas de actuar, las técnicas, los métodos, todo va evolucionando y es necesario mantenerse al día.
¿Qué temas cubre un buen curso de defensa personal policial?
Aquí te voy a contar las cosas que, desde mi experiencia y lo que he investigado, un buen curso serio debería incluir. Te pongo todo bien claro:
Técnicas de arresto
Esto es básico en la labor policial. El curso enseña cómo hacer arrestos sin que se te escape nadie y sin usar más fuerza de la necesaria. Por ejemplo:
- El cacheo: cómo registrar a una persona para asegurarte de que no lleva nada peligroso, sin causarle daño.
- El esposamiento: la forma correcta de poner esposas para que estén seguras y que no dañes a la persona.
- Detenciones de paso: esas detenciones rápidas que se hacen cuando ves algo raro y tienes que actuar en el momento.
- Conducciones obligadas: cómo llevar a una persona detenida sin que se escape o cause problemas.
Estas técnicas pueden parecer sencillas, pero si no las haces bien, pueden salir mal y complicarte mucho el trabajo.
Defensa personal ante agresiones sin armas
La mayoría de las peleas o ataques no tienen armas, pero igual son peligrosas. El curso enseña a defenderte ante varios tipos de agresiones, como:
- Agarres por delante y por detrás: saber cómo soltarte si alguien te agarra.
- Ataques con puño: cómo protegerte y contraatacar si alguien te quiere pegar con la mano.
- Ataques con pie y rodilla: aprender a bloquear y responder a patadas y rodillazos.
- Ataques con cabeza: que parece raro, pero un cabezazo duele mucho y hay que estar preparado.
Con estas técnicas puedes mantener el control sin hacerte daño, y controlar al agresor sin que la cosa se salga de madre.
Defensa personal ante agresiones con arma
Aquí la cosa se pone seria, porque enfrentarse a alguien armado es muy peligroso. El curso aborda tres tipos principales:
- Armas contundentes: por ejemplo, palos o piedras. Te enseñan a defenderte y a desarmar.
- Armas blancas: cuchillos o navajas. Aprendes técnicas para evitar que te hieran y cómo quitarle el arma al agresor.
- Armas de fuego: saber reaccionar rápido y cómo protegerte sin arriesgar a otros.
Esta parte es súper importante porque muchos policías se enfrentan a situaciones donde el delincuente lleva algún tipo de arma. No se trata de enfrentarte a lo loco, sino de saber cómo actuar para sobrevivir y controlar la situación.
Defensa reglamentaria: uso y manejo del bastón policial
El bastón es una herramienta fundamental para el policía. No es un arma cualquiera, y el curso enseña:
- Nomenclatura y partes del bastón: conocer bien con qué trabajas.
- Formas de empuñamiento y extracción: cómo agarrarlo rápido y usarlo bien.
- Zonas de golpeo: dónde golpear para que el agresor se rinda rápido, sin hacer daño grave.
- Ejercicios de habilidad y familiarización: para que el manejo del bastón sea natural y efectivo.
- Técnicas de conducción, control, proyección e inmovilización: para dominar al agresor con el bastón.
- Resolución de agarres y desarmes: si alguien te agarra o te intenta quitar el bastón.
- Defensa del bastón: cómo protegerlo y usarlo para defenderte.
- Conocimiento de otros útiles policiales: como las esposas, sprays o armas menos letales.
Este bloque es un pilar porque el bastón es una extensión del cuerpo del policía. Saber usarlo bien puede evitar lesiones tanto para ti como para la persona que detienes.
Ventajas de comprar un curso completo de defensa personal policial
Después de todo esto, te estarás preguntando: ¿y por qué debería comprar un curso así? ¿No basta con lo que te dan en la academia o en esos cursos básicos?
Mira, yo creo que un curso completo y actualizado tiene muchas ventajas:
- Te mantiene en forma y alerta: Las técnicas de defensa no solo son para la calle, también mejoran tu condición física y tus reflejos.
- Evitas lesiones y errores en el trabajo: Saber cómo actuar correctamente hace que no te lastimes ni lastimes a otros de manera innecesaria.
- Mayor confianza en ti mismo: Saber que estás bien preparado te da seguridad para actuar con calma y eficacia.
- Adaptación a nuevas situaciones: Las técnicas evolucionan, y también los tipos de agresiones. Un curso actualizado te prepara para los cambios.
- Mejora tu perfil profesional: Estar formado en defensa personal avanzada puede abrirte puertas dentro del cuerpo, para especializaciones o ascensos.
- Cumples con la ley y los protocolos: Aprender lo que dice la normativa sobre el uso de la fuerza te protege legalmente.
¿Y qué dice la ley sobre la defensa personal policial?
Esto es algo que muchos pasan por alto. No se trata solo de saber pelear o defenderte, sino de hacerlo siempre dentro del marco legal.
La ley dice que el policía debe usar la fuerza solo cuando sea estrictamente necesaria y en la medida justa. Eso significa que no puedes pasar de defenderte a agredir de forma desmedida. El curso te enseña justo eso: cómo controlar sin excederte.
Además, el uso del bastón, esposas y otros elementos tiene reglas claras, que si no respetas, te pueden traer problemas legales. Por eso, un curso que te actualice en todo esto es indispensable para no equivocarte.
¿Cuánto cuesta y dónde comprar un curso así?
Cuando yo busqué, me encontré con varios cursos, pero la mayoría eran muy básicos o demasiado caros. Sin embargo, también encontré cursos online que son bastante completos y con precios accesibles, pensados para policías en activo o en formación.
- Un curso online tiene la ventaja de que puedes hacerlo a tu ritmo y repasar las técnicas cuantas veces quieras. Además, suelen incluir vídeos prácticos y manuales descargables.
- Si prefieres algo presencial, también hay opciones, pero suelen ser más costosas y menos flexibles.
Desde la Academia Marin, academia con un amplio abanico de cursos muy interesantes, me aconsejaron que lo mejor es siempre un curso presencial, porque así puedes ver y utilizar estas técnicas en persona, y no aprenderlas desde la pantalla del ordenador.
Algunas cosas que debes tener en cuenta
- No te conformes con lo básico. El curso de dos horas que yo hice no me preparó para nada serio. Busca algo completo.
- Practica constantemente. La teoría está bien, pero la defensa personal se aprende con práctica.
- Consulta si el curso está avalado o recomendado por fuerzas policiales. Eso te da más seguridad de que es serio.
- Verifica que incluya actualizaciones y acceso a nuevos materiales. Así no se queda obsoleto.
- Asegúrate de que respete los protocolos legales. Es importante no aprender cosas que te puedan poner en problemas.
Mi experiencia personal
En mi caso, haber hecho ese primer curso básico me abrió los ojos. Me di cuenta de que hay mucho más por aprender y que no basta con solo saber cómo dar un golpe o esposar. La defensa personal policial es una disciplina que requiere formación constante y actualizada.
Ahora que estoy más cerca de presentarme a las oposiciones, pienso que un curso de reciclaje y actualización no solo me va a ayudar a pasar la prueba práctica, sino que me va a preparar para la realidad del día a día.
Si tú también eres policía, o quieres serlo, mi recomendación es clara: no dudes en invertir en un buen curso de defensa personal policial. Es una inversión para tu seguridad, para tu confianza y para hacer tu trabajo de la mejor manera posible.