Está claro que el mundo es un lugar mucho más globalizado ahora que antes. Ni que decir tiene que la tecnología ha tenido una influencia muy grande para que así sea, pero no ha sido la única ciencia que ha posibilitado este cambio. Sin duda, hay otro aspecto que ha hecho más fácil ese desarrollo del que acabamos de hablar: la facilidad en los transportes, sobre todo en lo que respecta al aéreo. Y es que el avión se ha convertido en el medio elegido por mucha gente para viajar hasta otros países. Su seguridad y rapidez son los principales argumentos.
A día de hoy, los aviones unen pueblos situados en lugares de todo el mundo. Gracias a ellos, todo está un poco más cerca. Y, desde luego, hay mucha gente que lo agradece. No cabe la menor duda de que hay diferentes motivos por los cuales se puede llevar a cabo un viaje: los negocios son una de las razones más potentes, pero es cierto que el turismo también juega una baza importante en lo que tiene que ver con este tema. Y es que el avión ha hecho más fácil que todos y todas podamos conocer el mundo.
España es un país que ha apostado por la aviación, tanto militar como de pasajeros. Según una noticia publicada en la página web del diario El Confidencial, España lideró en 2020 los pedidos militares a Airbus con 239 aviones, 73 de ellos de combate. No cabe la menor duda de que esto es una verdadera apuesta por el tráfico aéreo en todos los sentidos y que, desde luego, esta es una de las cosas que hace que España tenga una gran cantidad de visitantes todos los años. Es evidente que, cuantos más aviones, más conectados estaremos con el mundo.
Una gráfica que fue publicada en el portal web Statista informaba del tráfico total de pasajeros que se ha registrado en el interior de nuestras fronteras en los últimos años. En el año 2012 el tráfico había sido de 194 millones de personas, mientras que siete años más tarde, en 2019, esa cifra alcanzaba las 275 millones de personas. Ni que decir tiene que el crecimiento es tremendo y que hay que poner en valor todo lo que hemos venido consiguiendo a este respecto. Está claro que tiene mucho mérito y que es una de las claves de nuestro éxito en términos turísticos.
Un crecimiento como este se vio frenado como consecuencia de la pandemia, tal y como se desprende de la gráfica que habéis podido ver en el gráfico que os enlazábamos en el párrafo anterior. Y es que el confinamiento primero y las restricciones después han hecho que la movilidad de la gente se haya visto mermada en los dos últimos años, sobre todo en lo que respecta al avión, que ha sido el medio de transporte que más ha notado la reducción del flujo de gente en todo el mundo. Por suerte, las cosas están empezando a cambiar.
La aviación requiere de la máxima comunicación tanto entre los miembros de la tripulación como entre estos y sus respectivas estaciones. Y hacer esto posible requiere de la existencia de aparatos que nos permitan una comunicación que sea eficaz y que también sea fluida. Los profesionales de Milwalkies nos han indicado que los transceptores para aviación siguen siendo uno de los aparatos con más importancia para todas aquellas personas que se dedican de una u otra manera a aspectos ligados con la aviación. La comunicación a este respecto es clave para que no haya problemas de ningún tipo y es necesaria para catalogar a este medio de transporte como el más seguro.
Un medio de transporte que ha revolucionado el mundo
A nadie se le escapa el hecho de que la aviación ha cambiado el mundo en todos los sentidos. Es cierto que es un medio de transporte que sobre todo se desarrolló mucho como consecuencia de la aparición de la I Guerra Mundial, que tiene en parte un origen bélico. Pero se ha constituido como uno de los asuntos que más y mejor ha permitido avanzar a la sociedad en las últimas décadas.
Y es que estamos hablando de uno de los transportes que más gente mueve en todo el mundo cada año. El que ha permitido, en gran medida, que la globalización sea posible. Ahora ya no es ninguna quimera que una persona situada en Estados Unidos pueda desplazarse a Uzbekistán en menos de un día. Antes, para ello, eran necesarias semanas e incluso meses. Y no cabe la menor duda de que ese es uno de los motivos por los cuales la sociedad gira más rápido ahora que en ningún otro momento de la Historia.
